sábado, 22 de diciembre de 2012

Las Palmeras de la Plaza de Arriba


Un dia el alcaraván voló cerca de una plaza rodeada de arboles, le llamo la atención una musiquilla navideña que no se sabía de qué sitio provenía, el lo achaco a un Belén que estaría muy cerca de allí, pero por más que miraba no lo divisaba, se poso en un tejado cercano, por curiosidad observo la limpieza de la plaza, había dos empleados barriendo con escobas de clavellinas las hojas caídas de los arboles que estaban pegadas al suelo y no se podían barrer con los nuevos artilugios de viento, pues el dia anterior había llovido mucho. El alcaraván pensó que si se hubiesen plantado de hojas perennes, se hubiese ahorrado dinero y trabajo. Al cabo de un rato se le acerco un gorrión muy viejo, se fijo en el, pues era uno de esos gorriones rebechinosos que no dejan a nadie dormir la siesta con sus chirridos monótonos y extresante, acostunbrado a vivir de las migajas ajenas, el cual le comento, que la musiquilla, venia de la farola que esta en el centro de la plaza, que era la curiosidad de Españoles y Extranjeros, porque en sus años de vida nunca había visto mirar la farola a tantas gente. El alcaraván se fijo en una papelera que ponía un cartel de prohibido jugar a la pelota y pensó, esto es Andalucía y no el País Vasco. Se fijo en unas palmeras datileras dispares, que guardan la plaza como fieles centinelas de los pasos más importantes, ocho en total, dos por cada paso, una de ellas sería muy vieja, pues tenía una estrechez en su tronco muy peligrosa, y podía romperse, aunque su madera es muy resistente. Comentándoselo al gorrión, contesto que él había escuchado una conversación entre dos personas mayores sentadas en un banco de que no había peligro pues si se caía la palmera, se sujetaría con la del otro lado. Miro el alcaraván el caballete del tejado donde estaba posado y viéndolo todo lleno de cagadas, le dijo al gorrión por que había tantas, a lo cual contesto que todos sus compañeros a principio de la música se asustaron y se posaron en el caballete, pregunto el alcaraván que quien mandaba en la plaza, a lo que contesto el gorrión que el Ayuntamiento que por cierto estamos montados en su caballete, chao hermano gorrión yo me voy de aquí, no me vallan a echar la culpa a mí de estas cagadas que no son mía y me denuncien, el alcaraván siguió su vuelo hacia unas cuevas que se divisaba a lo lejos, en la cual le habían comentado, que años atrás habían criado Búhos reales ( Gran Duque) las cueva se llamaban de la Batihaa, hoy en dia Batida, pensó que se estaba haciendo un lio con eso del achismo y del dandismo





                                                        POR : El alcarván comí






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1 comentario:

  1. el articulo entrañable hasta el achismo y dandismo....jejjjeje parace ser que te has comido un datil amargo del suelo de dichas palmeras.jajajajajajj

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