Es un ave de la familia de las Gallináceas, su cuerpo es rechoncho de 35 a 38 cm. aproximadamente. En nuestros términos se encuentra en todos los terrenos y en todos los cultivos. Anidan en las orillas de las veredas, caminos, trochas, arroyos etc.… siempre que el pasto sea lo bastante abundante para ocultarlas. Las nidadas oscilan desde los seis a catorce o quince huevos, aunque hay excepciones. Nada más nacer el pollo tiene la facultad de poder seguir a su madre, son ágiles al correr, como se suele decir con el cascaron pegado al culo. Viven en bandadas y solamente se separan de ellas en tiempos de celo para acollerarse (unirse) machos y hembras. Es muy rápida en su vuelo, se puede decir que es la reina de nuestros campos.En la cornisa del Alcor hace aproximadamente unos treinta años, desde el cortijo de Ranilla hasta el cortijo de Triguero, se observó una mutación, que llegó incluso hasta el Carbones, algunas aves cambiaron su plumaje, adquiriendo un color blanquecino que en algunos ejemplares llegó a ser completamente blanco. Hoy en día parece ser que las aguas han vuelto a su cauce y la mutación ha desaparecido.
En la campiña hace unos veinticinco años hubo un brote de brucelosis (calenturas Maltas) producida por el pastoreo del ganado caprino, según el laboratorio donde se mandaron las muestras de aves enfermas, esto se llegó a corregir a base de la implantación de bebederos artificiales, en los cuales iba diluida una medicación a base de terramicina y otros productos sanitarios que dieron buenos resultados. La perdiz en nuestra vega y olivar, se halla sometida a la presión cinegética de los cotos privados y de la sociedades de cazadores, junto con el furtivismo, los plaguicidas, herbicidas, etc. que son los máximos depredadores de esta especie, más águilas, zorros, milanos, halcones Etc. Se está comentando en los círculos de cazadores que los espulga-bueyes (Garcilla), atacan implacablemente a las nidadas de polluelos recién nacidos, exterminando así a la mayoría de ellos.
También en la siega y recolección del trigo las máquinas cosechadoras destruyen muchas nidadas diezmando su población. Antaño muchos pollos de perdiz morían a causa de la quema de rastrojos, cosa que ya no sucede por haber alargado la administración el periodo que va desde la siega hasta la quema. En nuestro termino municipal, no hemos tenido ningún problema de sanguinidad en las pati-rojas, gracias a los cotos privados y a la sociedad de cazadores, que no han mezclado aves de granjas con las bravas autóctonas de nuestro territorio, por lo tanto podemos decir, que la población de perdices en las tierras de Carmona se conserva en buen estado de salud física, pero su número a disminuido de una forma muy alarmante, parece ser según comentarios debido a la meteorología y al furtivismo, esperemos que como el refrán dice ( se casaron y comieron perdices) y todos seamos felices, para disfrutar de ellas.
Por :El alcaraván comí
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